El Planeta de los Descuidos
“El Planeta de los Descuidos” es un mundo que no tiene nombre, simplemente un día se olvidaron de dárselo.
Es pequeño, bastante desordenado, sumido en el más completo de los desordenes. En sus ciudades los edificios tienen ventanas de menos o de más; carecen de tejado o puerta de entrada o simplemente se caen porque a alguien se le olvidó construir los pilares. Calles y avenidas terminan en ninguna parte, las señalizaciones indican lo contrario y aparecen monumentos sin terminar que nadie recuerda que conmemoraban.
En cualquier bar es normal que la bebida te la sirvan sobre la barra, pues al camarero se le ha olvidado el vaso, o puede que te sirvan el vaso sin bebida. Enfermos agonizantes esperan médicos que aun andan buscando la agenda sin saber donde coño la pusieron; la gente camina semidesnuda intentando recordar a donde tenían que ir exactamente mientras niños esperan a las puertas de sus colegios al padre que tendría que recogerlos. Cantidades enormes de paquetes urgentes llevan días o semanas de retraso atascados en las oficinas de correos y los comerciantes esperan escudriñando impacientes sus relojes a que lleguen las mercancías.
Un conductor descuidado se salta un semáforo en rojo atropellando a varios transeúntes que descuidados charlaban alegremente en medio de la calzada. Un descuidado policía detiene a una descuidada ancianita que en su descuido había metido en su bolso un collar de perlas que un descuidado pescadero le había vendido confundiéndolo con un besugo. Mientras un descuidado saxofonista sopla apasionadamente la oreja de una bella señorita que descuidada piensa que es su novio el que la babosea y ríe jocosa y descuidada de lo que los demás puedan pensar de ella.
Este es El Planeta de los Descuidos donde nadie se acuerda a tiempo de las fechas señaladas, donde enamorados esperan impacientes arrodillados ante altares a que llegue su amor. En él tu nombre no será recordado minutos después de haberte presentado y cualquier objeto que compres no sirve de nada puesto que en un descuido se han olvidado de terminarlo correctamente.
Cuidado Pepapoder! No te descuides con los escalones al desembarcar.
2 Comments:
Y tú me lo dices mientras clavas tus pupilas en las mías...
El Descuido, Ángel, eres tú :-D
Que descuidado soy, lo habia olvidado ;P
Publicar un comentario
<< Home